CIUDAD DE MÉXICO.
En los últimos 30 años, el mundo ha cambiado, hay más fuerza en la lucha indígena y de las mujeres. Pero la impunidad, la violencia y las guerras persisten, aseguró la activista y premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú Tum.
Hemos cambiado mucho. Había mucho silencio, características nefastas que ofendían la conciencia de todos nosotros. No sólo el tema de los pueblos indígenas sino también de las mujeres. La lucha de las mujeres estaba en una etapa bastante negada y hoy es otro mundo”, dijo en entrevista con Pascal Beltrán del Río para Imagen Radio.
Pero hay estructuras que permiten la impunidad, fomentan la violencia. También hay poderes fácticos que se esconden detrás de la trata y abusos a migrantes.
Es un mundo donde se ha perdido el ser humano. El valor del ser humano, el valor de la vida, la solidaridad, la honradez y por eso vemos que ha cambiado, hay nuevas normas, se han tipificado los crímenes de lesa humanidad como la tortura, la desaparición forzada”, afirmó la mujer maya quiché.
Galardonada con el premio Nobel de la Paz en 1992, se refirió a la invasión de Rusia a Ucrania y dijo que ninguna guerra es útil.
Ninguna guerra es producto de avance o sinónimo de civilización. Eso es miseria humana. Estallar en guerras ahora es como volver a lo más miserable de las decisiones que tomen los humanos”, lamentó.
Sin embargo dijo estar consciente de que el conflicto tiene intereses profundos y hay ventajas de quienes protagonizan la guerra.
Por eso, como no soy una de las partes, quisiera abogar por el fin de esa guerra cuanto antes. Quiero pedirle al mundo que apoye el diálogo, la negociación política y que guarden sus armas, sus misiles o que las destruyan”, sostuvo.
Aceptó que su lucha para que termine esa guerra es “utópica”.
Lo más grande que logró la humanidad después de la Segunda Guerra Mundial es el multilateralismo, la ONU. Pero ese tesoro que tuvo su época de oro no tiene sentido si no se cumplen las normas internacionales, como la autodeterminación, la soberanía. Los mandan por un tubo.
Si la ONU no corrige lo que ha perdido estos años, la ONU está jugando otro papel.
Ahora estamos esperando un colapso de la humanidad, hay guerras mundiales tocando nuestra puerta. El calentamiento global que amenaza la soberanía alimentaria de millones que no tienen esperanza en el llamado desarrollo sostenible”, afirmó la mujer de 63 años.
DEFENDER LA INDIGNACIÓN
Al responder sobre el caso de lo ocurrido en nuestro país con la joven desaparecida en Nuevo León, Debanhi Escobar y encontrada muerta días después, llamó a que el caso genere lucha e indignación.
Hay que rendir homenaje a las energías y la fuerza de Debanhi, porque es una pequeña luz que viene a tocar nuestras puertas una vez más para que nos indignemos, para que luchemos, para que exijamos”, dijo.
La tolerancia de las instituciones del Estado es brutal, sostuvo la mujer que comenzó a militar en el Comité Unidad Campesina.
La impunidad, el tener que reparar el trabajo que le corresponde por ejemplo al Ministerio Público, y no hay una confianza que de que en verdad se esté investigando o que se llegue a juzgar a los responsables y que purguen una pena”, lamentó.
Yo no veo nada de eso a pesar de que es un delito de lesa humanidad”, agregó.
Denunció que la impunidad, la corrupción, los sobornos y el miedo de tocar los poderes generan una complicidad.
El Estado no está haciendo lo que debe hacer. Si no se impone un castigo, es una ley muerta, lamentó.
MÁS QUE FOLCLOR
La mujer que llegó a México como exiliada en 1981 celebró los avances en la lucha indigenista.
Hemos señalado la inmensa carga de discriminación y racismo. Hoy eso es sancionado por la conciencia de millones de ciudadanos del mundo. De los 32 millones de indígenas de Mesoamérica, entre ellos México, el panorama del pasado continúa. La falta de acceso, la falta de desarrollo integral, participación y consulta”, denunció.
Para ella, hay una relación de pobreza-rostro indígena; violencia territorial-rostro indígena.
Me siento orgullosa de haber contribuido, pero también me siento harta. Se usa a los indígenas con un objetivo de folclor”, acusó.
En tanto somos mayoría, la población tiene sus propias grandezas. Ya quitamos la noción de los indígenas como un objeto cultural, hemos afianzado el sistema ancestral”, celebró.
Su país ha sentado base en delitos de lesa humanidad, se juzga la discriminación como delito.
Respecto a la construcción del Tren Maya, en el sureste de México, Menchú defendió la realización de la consulta a los pueblos indígenas en una zona con fuerza maya.
Por sentido común, los mexicanos tienen que saber que su fuerza, su riqueza, su memoria, es tan vital hoy por hoy. Tenemos que preservar ese respeto a la Madre Tierra. Cualquier megaproyecto que no cumpla con códigos éticos de respeto a la madre tierra hay que señalarlo”, concluyó.
Los megaproyectos hacen un diseño en un cuarto tecnológico pero se les olvida que hay gente ahí”
UNA VIDA DE LUCHA
-Rigoberta Menchú Tum nació el 9 de enero de 1959 en Chimel, municipio de San Miguel Uspantán, departamento de El Quiché, en Guatemala.
-Su familia fue víctima de tortura por parte del gobierno de su país.
-Militó desde 1997 en el Comité Unidad Campesina.
-La activista indígena llegó a México en 1981 como exiliada.
-En diciembre de 2013, fue nombrada investigadora extraordinaria de la UNAM.
Contenidos Relacionados: Rigoberta Menchú se une a llamado de México para combatir tráfico de armasSostiene Rutilio Escandón encuentro con Rigoberta Menchú, Premio Nobel de la PazPresenta Ebrard a Rigoberta Menchú Plan de DesarrolloRedadas en EU ofenden a migrantes del mundo: Rigoberta MenchúPide Rigoberta Menchú fin del colonialismo actual a indígenasRigoberta Menchú pide atención integral a caravana migrante2024-09-22 08:32:52