Muristek
EFRÉN ARGÜELLES
Ante la inminente temporada de lluvias, la Ciudad de México enfrenta otra amenaza, además de las inundaciones: la caída de árboles debilitados por la plaga del muérdago.
De acuerdo con Roberto Quintero, ingeniero agrónomo de la Secretaría del Medio Ambiente capitalina (Sedema), cuando el muérdago infesta un árbol, mete sus raíces al interior de las ramas del espécimen y succiona agua y nutrientes de la reserva que tiene el árbol, secándolo.
Es una planta que tiene un sistema metabólico muy avanzado, muy desarrollado con la evolución de los años, y hace fotosíntesis en sus hojas a través de una estimulación de la luz solar. En la época que heay mayor tempratura, que hay mayor radiación solar, el muérdago se desarrolla con mayor velocidad; fructifica alrededor de tres a cuatro veces al año, esa forma también es su me dio de reproducción de multiplicación y la semilla tiene un poderosísimo poder germinativo”, explicó el ingeniero.
Esto representa un riesgo ya que el muérdago “mata a los árboles de pie” por lo que, en temporada de lluvias y vientos fuertes, el ejemplar infectado puede caer sobre vehículos, personas o casas.
La afectación por muérdago y el no control a tiempo del muérdago, puede provocar la muerte del árbol.
En el caso de los ejemplares más grandes como los fresnos, que son árboles de 40 metros (y representan 30% del arbolado capitalino), cuando hay etapa avanzada de muérdago se forma una especie de domo que con el peso del granizo o lluvia aumenta el riesgo de caer sobre un auto parado o en movimiento, o sobre una persona, lo cual sería fatal”, indicó Quintero.
De acuerdo con el ingeniero agrónomo, se tiene el registro de que el muérdago llegó hace unos 25 años y fue una plaga que provino del sur, de Cuernavaca.
ATENCIONES
Desde el inicio de la temporada de lluvias, la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC) ha atendido decenas de reportes por caídas de ramas y árboles.
Los más recientes fueron el viernes 17 de junio, cuando una rama de 12 metros de longitud cayó en la colonia Copilco Universidad, otra de ocho metros de longitud en la colonia
Barrio de San Lucas; asimismo, la SGIRPC atendió la caída de otra rama de 12 metros de longitud que dañó cableado de telefonía en la colonia Álamos y la caída de un árbol de 12 metros en la esquina de Pilares y Adolfo Prieto, en la colonia del Valle.
SIN CONTROL PERMANENTE
De acuerdo con la Sedema, de los tres millones de árboles que existen en la zona urbana de la Ciu- dad de México, alrededor de 900 mil unidades padece una plaga, siendo el muérdago la enfermedad principal.
Roberto Quintero señaló que actualmente hay dos formas de erradicar el muérdago: la primera es podar la parte afectada, que puede ser de 50% a 60% de la copa, la cual debe de ser precedida por varias podas de control; y la segunda, el producto aniquilador integral de la plaga, que desfolla el árbol afectado.
Sin embargo, lo que tenemos hoy, ni la poda ni el aniquilador, controlan permanentemente el muérdago”, aseguró el ingeniero agrónomo, quien propuso realizar campañas anuales de poda para disminuir los efectos generados por el muérdago.
cva
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